Marianela Fontana viajó a Francia a través del proyecto SMART FARMING del programa de Movilidad ARFAGRI. La docente de Tecnologías de Tierras y Microbiología Agrícola de la FCA-UNER, explicó que la experiencia es una puerta para continuar intercambiando conocimientos: “plantear cursos, movilidades estudiantiles y docentes, investigaciones en conjunto, así como posibilidades de trabajos colaborativos como COIL´s”.
Entre el 9 al 14 de junio, Marianela Fontana y los docentes Rodrigo Lopez Plantey (UN Cuyo) y Martín Díaz Zorita (UN La Pampa) estuvieron en Lille, al norte de Francia -en el límite con Bélgica-, participando de recorridos, encuentros y actividades de la Escuela de Ingenieros ISA JUNIA.
Durante esos días, visitaron diferentes campos de productores con quienes las instituciones educativas francesas desarrollan investigaciones y ensayos, ya que no cuentan con campos experimentales propios, por lo cuál, se asocian con productores y empresas de la zona para realizar actividades.
“Los primeros días recorrimos la escuela secundaria Institute Genech, la cuál tiene tambo, ovejas, huerta, floricultura y mejoramiento de semillas. Es interesante cómo en esta escuela (que también cuenta con un instituto terciario) se asocia con distintas empresas para realizar servicios. Por ejemplo, las empresas les proveen manzanas y ellos realizan la producción de jugo y envasado”, contó la docente de la FCA.
“Los problemas que tienen (e investigan) son por ejemplo: excesos de N en los suelos por exceso de fertilización nitrogenada, además de la erosión hídrica en algunas zonas. Pudimos visitar un campo con investigación en agroforestería, así como también una granja urbana donde realizan producciones hortícolas y de vivero en invernadero, además de hongos (girgolas, shitake y melena de león) y de peces (truchas)” , detalló Marianela Fontana. “La investigación también se centra en el biocontrol y estudio de bioestimulantes, como estrategias complementarias a la producción agroecológica. Hoy día, la producción orgánica está disminuyendo y muchos productores se están volcando nuevamente a la producción tradicional. Ocurre que los consumidores franceses, debido a una especie de crisis, están priorizando precio antes que producto”.
El día miércoles 12, luego de que realizarán una presentación de sus instituciones de origen, el plantel de docentes argentinos viajó hacía Angers, al suroeste de París. “Si en el norte hay papa, remolacha azucarera, cebada y trigo, en el sur de Francia la producción es principalmente vitivinícola”, contó la docente de la FCA.
En relación a las diferencias académicas entre países, Marianela detalló: “la estructura del sistema educativo universitario funciona del siguiente modo: los primeros tres años conforman el Bachelor (general) que les otorga un título intermedio. Luego, deben optar por una especialidad que realizan durante el cuarto año que se denomina Master 1, y el quinto año llamado Master 2.”
En cuanto a desarrollo de la carrera, la docente destacó el sistema de pasantías al que calificó de `muy desarrollado´: “Durante la carrera tienen dos momentos de pasantías y en el último medio de año de cursado, se dedican a las pasantías con empresas privada”, contó.
Para finalizar, Marianela resaltó “Este viaje no fue sólo reuniones, también me permitió aprender un poco de la cultura e historia del país, además de lo culinario. Esta experiencia no cierra con el viaje, el proyecto ARFAGRI tiene dos años más y el objetivo es plantear cursos (en principio de Agricultura de Precisión para fin de 2024), intercambios estudiantiles, intercambios de docentes franceses hacia Argentina, así como realizar reuniones de futuros proyectos de investigación y posibilidades de trabajos colaborativos como COIL´s, entre otras actividades”.
